Fosa nasal

Aquí tenemos una imagen que representa una sección de la cabeza en la que vemos el interior de la fosa nasal. En éste espacio, al respirar, quedan retenidas algunas moléculas de las que van flotando disueltas en el aire. 

Las conexiones  neuronales del bulbo olfativo se encargan de hacer llegar su señal al interior de la bóveda craneal para su identificación y clasificación. 

Nuestro cerebro las relaciona y nos informa de cómo debemos actuar,  así por ejemplo, si se descubre que han penetrado feromonas, desde lo más recóndito de nuestro cerebro se nos ordenará mover las caderas delante y atrás, delante y atrás… Cuando todo vaya mal, mueve tus caderas una vez más, delante y atrás…  

Es una ilustración hecha con aerógrafo y posteriormente digitalizada.  

Cáncer de piel (2)

Más del 50% del los cánceres que se diagnostican son de piel. Aquí os presento otro dibujo de la serie correspondiente a éste tipo de cáncer, y que muestra las alteraciones cutáneas de una de sus variantes.

Cáncer de piel (1)

Son varias las enfermedades que se denominan con éste nombre, pero, entre ellas, lo único que tienen en común es que se producen en la piel. No obstante, para evitarlas, hay que tener presentes una serie de síntomas básicos que debemos vigilar en nuestra piel: 1) Si nuestro lunar o mancha es reciente y de forma asimétrica. 2) Si sus bordes tienen forma irregular. 3) Si el color se va oscureciendo paulatinamente. 4) Si su diámetro es superior a 6 mm o va creciendo. En estos casos, es aconsejable pedir la opinión del especialista.

En el dibujo se muestra la forma de uno de los diferentes tipos de cáncer. Lo he realizado con aerógrafo y luego lo he digitalizado. 

Tinea Hermes

Otro dibujo hecho con aerógrafo perteneciente a la serie de microorganismos. En éste caso es un agente causante de la “Tinea Hermes” y forma parte de un atlas dedicado a las enfermedades de la piel.

Mucosa nasal

En uno de los rincones del interior de nuestra cabeza, habitan éstas células que veis en el dibujo. Son las células ciliadas de la mucosa nasal, una membrana húmeda que tenemos en el interior de nuestras fosas nasales. Es otra de las ilustraciones hechas con aerógrafo para un atlas del sistema respiratorio publicado en su día por Gorg Blanc. Os muestro el boceto previo y el definitivo. 

Arrimar el hombro

Nos piden que arrimemos el hombro, que hay que ayudar a la sanidad, que está muy malita, que nos dejemos de hacer la guerra por cuenta propia, que la tenemos que hacer todos juntos, pero... es que uno es pacifista y... ¿aún más, tenemos que arrimar el hombro?... ¿y dónde y cómo?... a ver si de tanto arrimarlo a la fuerza nos lo van a lesionar. Mira que eso duele mucho y cuesta mucho de sanar... a ver si nos van a dejar el hombro en los huesos con tanto quitar grasas superfluas y tanta obligada liposucción a la brava. Al final nos lo quebrarán. 

Así que, en éste dibujo, podéis apreciar como os veréis si al final os quitan todos los músculos (imprescindibles cuando se trata de arrimar el hombro), la grasa, la piel y el resto de tejidos. Es una ilustración que he hecho originalmente con aerógrafo y luego he digitalizado con photoshop.

La prima

El futuro es incierto.  Dicen que corremos el riesgo de que nuestra prima nos afeite la barba como a algunos de nuestros vecinos, que ya les ha pasado con las suyas respectivas.  Con lo bonito que es eso de afeitarse cuando uno quiera,  sin el estrés de tener que estar pendientes de si la prima vendrá por la mañana o por la tarde… o por la noche, que todo puede ser,  ya que ella viene cuando le da la gana que para eso es la prima.  ¡¡Menuda es ella!!...   cuando se trata de afeitar no tiene miramientos. Ahora ya no es moda eso de llevar barba, aunque sea rala,  y a la prima  se le ha metido en la cabeza que hay que estar a la última, así que, cuando tenga un ratito, se nos planta aquí y ya puede Rajoy ponerse como quiera y decir que primero se la corte a Rubalcaba que la culpa es de él, pero ah…  a ese ya no le pillan, pues se ha ido por la puerta de atrás, con el rabo entre las piernas y con intención de dejarse crecer la barba al estilo indigente.  Total, que la puñetera de la prima nos la va a recortar y el siguiente paso, tanto si nos dejamos como si no, será que nos haga elegir entre la depilación genital  pelo a pelo, con pinzas, o a la cera, que a ella le da igual con tal de que vayamos al último grito, pero eso sí, calladitos que estamos más guapos.  

Aquí en las imágenes que os muestro, se puede ver cómo queda uno, o una, después de que le afeiten y corten en canal. Son unos dibujos hechos con aerógrafo y posteriormente digitalizados. Espero que os gusten. 

Alveolo mamario

Aquí tenemos una imagen que representa un acino o alveolo mamario. Éste es el punto de origen de donde parten las gotitas de leche que, unidas a otras muchas más que, a su vez, también salen cada una de su acino particular, van pasando a través de los conductos galactóforos hasta llegar al pezón de uno de los pechos de la mamá. Allí espera impaciente la boca del bebé para saciar su apetito y donde la gota de leche cumple su función, satisfecha del deber cumplido…. se supone.

Éste es un dibujo que he hecho con aerógrafo para una publicación médica. 

Tiroides

Ésta glándula neuroendocrina situada sobre la tráquea y bajo la “nuez de Adán” es la responsable de la regulación del metabolismo y crecimiento de nuestro cuerpo. Genera la “tiroxina” que es una hormona que contiene como elemento principal el yodo.
Es una pieza fundamental de nuestro engranaje que cuando no funciona bien puede provocarnos serios problemas. 
Usé el aerógrafo para la elaboración de ésta ilustración. 

C1

C1 es el nombre de éste hueso que ilustré con aerógrafo para la editorial Gorg Blanc.

Se llama así por ser la primera vértebra cervical, C de cervical y 1 de primera, evidentemente. Pero ese nombre, no sé por qué, me recuerda a algún robot de película de ciencia ficción, o también a alguna pieza de algún manual de instrucciones, así que prefiero llamarlo por su otro nombre: Atlas. 

Dicen que Zeus, el padre de los dioses del Olimpo, sometió a un duro castigo al titán Atlas asignándole la ardua tarea de soportar sobre sus hombros las columnas que separan el cielo de la tierra. Igual que el titán Atlas, C1 tiene la dura tarea de soportar el peso de nuestra cabeza sobre el resto de nuestro cuerpo sin desfallecer ni un momento.

Más allá

Hay muchas teorías sobre el “más allá”. 

Sí, se suele llamar así a ese sitio al que iremos todos cuando nos muramos. Unos dicen que es un lugar donde reina la paz, la armonía, y todo el tiempo suena una música celestial, siempre y cuando se lo haya merecido uno por sus buenas acciones en ésta vida, pues, en caso contrario, tendremos que soportar el vivir toda la eternidad entre brasas ardientes, mientras unos seres repugnantes nos pinchas constantemente con unos tenedores muy largos simplemente porque les gusta hacer ese tipo de cosas…. Otros dicen que nos reencarnaremos en otro tipo de vida y, en éste caso, tanto cabría la posibilidad  de que nos tocase ser una piedra en el camino, como una pera limonera, o como un escarabajo pelotero, o como un elefante o, en la mejor de las posibilidades, como todo un señor premio nobel de la paz, por poner un ejemplo…  En definitiva, a ciencia cierta no sé cómo será ese “más allá” pero lo que es seguro es que en el “más acá” acabaremos todos más o menos como en este dibujo… o sea, en los huesos… y seguro que mucho más desparramados y estropeados que estos de aquí.

Huesos

Tibia puede ser aquella mujer que no da ni frio ni calor o, la leche que nos tomamos justo antes de que se enfríe demasiado, pero también nos referimos a aquellos huesos con los que los piratas solían decorar sus banderas acompañados de una temible calavera. Aquellas banderas que provocaban el terror en los mares del Caribe -y en otros también-, eran un aviso para navegantes de que, si ofrecían la menor resistencia,  sus huesos podían acabar en las profundidades del océano haciendo compañía a los peces, y no sólo las tibias, sino también los peronés, o los cúbitos y radios… si, como esos del dibujo.   

Célula

Seguimos con otra ilustración de carácter divulgativo. Es la representación de una célula "tipo" para un Atlas de la editorial Gorg Blanc. Se trata de la típica célula eucariota animal, con su membrana, su citoplasma y su núcleo, aparte de sus mitocondrias, ribosomas, aparatos de Golgi y retículos endoplasmáticos. Todos nosotros tenemos unas cuantas como ésta o muy parecidas, con sus variantes, según para qué las necesitemos. Como dice la canción... sin ellas no somos nada...

Puzzle craneal

Me va a estallar la cabeza!!!!.... muchas veces, esa es la frase que sale de nuestros labios cuando tenemos esas desagradables migrañas, jaquecas y cefaleas diversas. Menos mal que no nos  suele ocurrir, en ese sentido tan literal, pues el resultado sería algo así como lo que vemos en el dibujo que os muestro y que me lo publicaron en un Atlas de anatomía de la editorial Gorg Blanc. Nuestro cráneo quedaría fraccionado en mil trocitos y no necesariamente saldrían  proyectados al espacio de forma tan ordenada y didáctica…

Médula espinal

Pero sigamos, detrás de nuestras entrañas, si miramos de frente, veremos nuestro espinazo o columna vertebral. Dentro de ella, por su meollo, pasan constantemente órdenes de nuestro cerebro hacia el resto de partes de nuestro cuerpo. Es como si fuera nuestra autopista interna de largo recorrido, por donde circulan los impulsos nerviosos como bólidos sin miedo a ser multados por exceso de velocidad. En éste dibujo se ve una sección de esa supuesta autopista que es la médula espinal.

Vísceras

Pasemos a ver otras interioridades -nuestras más íntimas entrañas-, las vísceras que tenemos en el tronco.

Ya sé que no son imágenes para estómagos delicados, pero si queremos saber hay que ver… ahí tenemos parte de nuestra belleza interior.

Oído

... y siguiendo en la linea de instrospección interna de algunos de nuestros organos sensoriales aqui vemos una representación del oído en una sección que deja ver sus diferentes partes:

Ojo

… y dentro de ella, veamos como es esa ventana a la que nos asomamos para apreciar la luz del exterior…  esa  herramienta compleja que es nuestro ojo: Un mecanismo de precisión preparado para fotografiar en nuestro cerebro todas las formas y colores que nos rodean.